
Namaste se compone de dos partes: “namas” significa “inclinarse ante” u “honrar a” y “te” significa “para ti”. Así que namaste significa “me inclino ante ti”. En hindi y en otros idiomas derivados del sánscrito, namaste es básicamente una forma respetuosa de saludar y también de despedirse.
El significado real es muy profundo: “El Dios que hay en mí saluda al Dios que hay en ti”. En este sentido, la palabra Dios podemos sustituirla por “lo divino” o “mi espíritu”, dada la amplitud de acepciones que podemos encontrar en este idioma. De esta manera, en esta connotación todos los seres serían consideradas, en esencia, “Dios”
En la tradición hinduista y budista se le otorga además la condición de saludo sagrado. Es muy popular en la India, Nepal y la zona del Himalaya. También se utiliza en del mundo del yoga, ciencia milenaria también originada en la India.

Namaste, la luz dentro de ti
Namasté es más que una palabra, es una forma de vida. Es una forma de mostrar respeto: por ti mismo, por los demás, por nuestro mundo y por la naturaleza.
Piénsalo como una forma de conexión con todo lo que nos rodea. No es una idea religiosa, sino más bien un manera de entender la vida. Es una forma de trascender nuestro propio ego y valores, de manera que puedas abrirte y mostrar compasión y empatía con los demás en todos los aspectos de la vida.
La posición de las manos
En el hinduismo la manera en la que se colocan las manos para hacer el saludo Namasté, tiene un significado divino. La palma derecha de la mano representan los pies de Dios, mientras que la palma izquierda de la mano representa la cabeza de la persona que realiza el saludo. Por este motivo se suele utilizar en muchas meditaciones el mudra Namasté.
Este gesto, puede explicarse como una forma de eliminar las diferencias que pueda haber entre dos personas. En estos casos, la palma de la mano derecha representa la parte más espiritual y esencial de las personas y la palma de la manos izquierda todo lo contrario, el ego y el orgullo. Al unirlas sobre la altura del chacra del corazón se demuestra la intención de dejar de lado todas las rencillas y diferencias que pudieran existir entre dos o más personas.
Cuando el saludo Namaste se realiza desde la autenticidad del alma, se crea un vínculo genuino entre las dos personas, más allá de intereses, expectativas y roles sociales.