
Recuerdalo siempre la persona más importante eres tú, independiente cual sea tu plan de vida, la única persona que estará al lado tuyo eres tu mismo. Tu presente y tu futuro están definidos por la importancia que le das a tu bienestar y a tu propio crecimiento personal.
Ámate a ti mismo y evaluar en qué lugar estas en tu lista de prioridades y revisar qué cosas en este momento ocupan el lugar que deberías estar ocupando tú en tu vida.
No hablamos de egoísmo, no, estamos hablando de de amor propio y autoestima. Cuando cambias tu forma de ser, cuando cambias tus prioridades por no quedarte solo o por complacer a tu pareja, no solo estas perdiendo autonomía, también estas vendiendo tu valor personal, tu integridad y sobre todo estas alejando cualquier posibilidad para hacer realidad tus sueños.
Los seres humanos no somos perfectos, eso esta claro, pero a pesar de nuestros errores, faltas, defectos y contrariedades somos valiosos, no debes ceder a tu esencia independiente cual situación sea.
Haz de ti la persona más importante de tu vida.
• Ten tu momento sagrado
• No busques la aprobación de otros, busca tu propia aprobación.
• Elimina la gente negativa. Define tus límites en las relaciones.
• Incluye en tu vida el tiempo de ocio.“El ocio” una palabra a la que a veces solemos atribuirle una connotación negativa pero no debería ser así, es necesario que incluyas en tu vida momentos para desarrollar tus pasiones y hobbies, las actividades que te gustan y te relajan, pues son precisamente estas las que te recargan de energía positiva, te generan la sensación de descanso y te permiten llevar una vida plena y feliz.
Recuerda darte a ti mismo tiempo de calidad, energía suficiente y el amor que te mereces, para que construyas un ser valioso que tenga la capacidad de dar a los otros e impactar de forma positiva el mundo.
La invitación es a que evalúes si las acciones que realizas antes de afectar a los demás afectan tu integridad, aprende a conocerte, a tener claros los límites en cualquier tipo de relación personal, aprende a decir no, ten presente siempre cuales son tus derechos y definitivamente nunca permitas que nadie te humille o abuse de tu generosidad o amabilidad.